"El arte existe porque la vida no es suficiente."
Ferreira Gullar.
Cuando miramos un libro, sea físico o digital, ¿qué vemos? Se queda corta cualquier persona que diga "veo texto". En esos pocos pero muchos (¿se entiende?) seis añitos de editorial, deambulando por ferias, librerías, charlas y conferencias, descubrí que un libro puede ser algo, incluso, sin texto, con páginas por escribir y hasta folios por añadir. No por nada se le llama al libro Obra. Tal y como colgamos un cuadro en la pared, vemos un espectáculo teatral, nos plantamos con palomitas y bebidas frente a una pantalla de cine, admiramos un busto o una estatua por la calle o en los museos, nos emocionamos y tarareamos nuestras canciones preferidas en un concierto... ojeamos, subrayamos (¡causando pánico en algunos!), le descargamos o descansamos el libro en nuestra mesita de noche diciéndole "luego nos vemos".
El Libro, tal y como esas obras artísticas que menciono, también es una obra de arte. Arte literario. Y como toda obra, cuenta con un equipo de artistas que le piensan, le sueñan, le crean y le dan vida. Una de esas artistas es la diseñadora o el diseñador del libro. En el caso de Ambulantes, es la carioca Andréa Bellotti. En el año 2011, cuando nacía Ediciones Ambulantes, no tuvimos ninguna duda en invitarla a trabajar con nosotros en este proyecto. Desde su profesionalidad y calidad artística, nos dio la mano y confió en la editorial cuando todavía no se sabía adónde iríamos llegar, ni si llegaríamos. Y aquí estamos. Y con Andréa.
Conozco su amor y alma por la literatura y el diseño desde la época preuniversitaria, como estudiantes y compañeras de clase, desde nuestros 18 añitos. Entre una que otra carcajada (era imposible aburrirse con nuestro grupo), a Andréa le encantaba regalarme papelitos con frases de Mário Quintana, Gandhi u otros escritores/pensadores. No era cualquier escritor o frase, le gustaba mantener un nivel y yo también era exigente: es que si no no compartía con ella, en el intervalo de clases, el paquete de galletas de leche que nos encantaba, a las cuales llamábamos cariñosamente "biscoito da vaquinha", que yo llevaba religiosamente en mi bolso. ¡Qué recuerdos más buenos y más dulces! Cuando vayáis a Brasil, pasad (tampoco mucho) de las caipirinhas o las feijoadas, y corred hacia ¡los "biscoitos da vaquinha"! En fin... Para que no os entre el hambre, mejor volvamos al libro y conozcamos un poco más, a través de esta entrevista a Andréa Bellotti, ese mundo de ilustraciones, diseños, literatura y pasión, mucha pasión por lo que se hace. Lo que viene siendo el alma de todo auténtico Ambulante.
AMBULANTES: ¿Por qué, dentro del mundo del diseño, elegiste trabajar específicamente con libros?
BELLOTTI: En general, siempre me gustaron los libros, las historias e ilustraciones. Dibujo desde muy joven, desde niña. Cuando ingresé en la facultad y descubrí que el diseño editorial era una especialidad del diseño gráfico, mi interés y encanto ocurrieron de manera natural. Me notaba entusiasmada al saber que en esa área podría reunir proyecto gráfico e ilustración, saber en los mínimos detalles cómo aquel objeto que me encantaba en la infancia era producido (fuese por las ilustraciones o fuese por las historias), y poder producir algo que proporcionara experiencias tan geniales como las que tuve y otras completamente diferentes de las que tuve.
AMBULANTES: También estás especializada en libros digitales. En tu opinión, ¿el ebook tiene futuro, ya es una realidad en el presente o todavía es algo distante?
BELLOTTI: El ebook es una super realidad con un potencial inmenso de diseño y comercialización. Pero el mercado editorial, me refiero al mercado editorial brasileño, todavía no sabe cómo adecuarse a las nuevas maneras de comercialización del libro. Creo que, en realidad, la cuestión no es adecuarse sino cambiar. No es una adecuación, no es "hacer un apaño"... es cambiar. Aquí el ebook todavía es visto como un subproduto del libro impreso. Aún no hemos desarrollado una cultura del libro digital.
AMBULANTES: Háblanos un poco sobre cómo es tu proceso de creación de cubiertas con los libros de Ediciones Ambulantes.
BELLOTTI: Ediciones Ambulantes siempre me da mucha libertad para crear, y eso es una maravilla. En el mercado editorial no siempre (casi nunca) tenemos esa oportunidad. La mayoría de las veces, para atender a temas puramente mercadológicos, el proceso de "creación" tiene que ser casi mecánico. Ritmo, forma, peso, volumen, textura y otros conceptos de diseño son apartados hacia un lado. Pero es una cuestión de supervivencia en el mercado.
Siempre empiezo leyendo el texto, conversando con los editores y, siempre que se pueda, también con los autores para entender y sentir mejor el contenido, saber qué pretende transmitir el autor.
Luego es básicamente un proceso de investigación, de formas, texturas, imágenes... que no tiene un orden, pero invariablemente pasa por el diseño. Lápiz y papel. Uso la técnica de ilustración (puede ser con fotografía, puede ser totalmente digital, o un diseño a lápiz, acuarela, o bien un collage con recortes de revistas, una textura que creo y luego escaneo...) con la que pienso que se transmitirá mejor el concepto de aquel contenido además de todo lo que oí de los editores y autores, sin revelar demasiado. El diseño editorial es casi invisible. Articula forma y contenido, texto e imagem, a través de un lenguaje visual equilibrado con el objetivo de despertar la curiosidad del lector y transmitir una información. Es una combinación de factores que hace que el lector se sienta atraído y a gusto sin saber exactamente por cuál motivo.
AMBULANTES: En Brasil hay un dicho que dice que no se debe juzgar el libro por su cubierta. ¿Qué opinas sobre esto?
BELLOTTI: No juzgues un libro (menos aún a las personas) por la cubierta. La cubierta es, o al menos debería ser, un espacio para la construcción imagética del diseñador. Hacer la cubierta de un libro no es meramente hacer una ilustración didáctica del contenido. El diseñador tiene un comprometimiento con un concepto que muchas de las veces va más allá de lo que es la literalidad del contenido.
El mercado está cambiando, la venta de los libros aquí en Brasil ha bajado y la cubierta es vista cada vez más como un elemento poderoso para sostener las ventas. Noto cada vez más una preocupación con el visual de la cubierta. En milésimas de segundo la editorial tiene que llamar la atención del lector que camina por la librería... y la que llama la atención de ese lector es la cubierta. La famosa compra por impulso. Y, claro, el diseñador tiene su "culpa" en todo eso. Yo misma soy víctima de eso; también compro libros solamente por la cubierta. Pero busco no hacer un juicio previo del contenido.
AMBULANTES: ¿Cómo equilibras la teoría de toda tu formación académica con la práctica del día a día laboral?
BELLOTTI: Soy una apasionada del diseño y de pensar en diseño. El pasado año concluí mi máster en Diseño y durante el período en el que estuve inmersa en la academia el único canal que mantuve con el mercado, produciendo cubiertas, fue con Ambulantes. Me encanta trabajar en el proceso editorial y en Ambulantes puedo ejercer mi función del modo en el que creo que debe ser.
Mi gran interés es el libro, sea impreso o digital. Mi proceso creativo en el desarrollo de proyectos gráficos editoriales se basa en dos aspectos: uno académico y otro artístico. Las investigaciones académicas relacionadas al universo del libro me ayudan a entender cómo pensamos y producimos el diseño editorial. Por otro lado, creo que por ser posgraduada en Historia del Arte y Arquitectura, mi mirada se aleja del academicismo y comprende el libro como un objeto que va más allá del campo bidimensional de la cubierta y de la página.
Me gusta transitar entre la libertad de los libros del artista y las verjas organizacionales del espacio de la página para desarrollar mi trabajo y provocar el descubrimiento de nuevos caminos para la expresión del contenido literario.
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Si te ha picado el gusanito y todavía no conoces todas las cubiertas de Andréa Bellotti para Ediciones Ambulantes, siempre puedes verlas en la web. ¡Y que viva el arte!